De las montañas que rodean al pueblo de Jaraba surgen los manantiales de agua termal que han dado fama a esta localidad. El monumento al agua, varios humilladeros y la iglesia de la Transfiguración son junto con el destacado Santuario de la Virgen de Jaraba, su principal patrimonio histórico-artístico.
Además de su conjunto urbano, Jaraba tiene, sobre todo, un entorno natural sobresaliente: la belleza de sus riberas y los cañones del río Mesa.