paracuellos de jiloca
Cerca ya de la desembocadura del rio Jiloca y a pocos kilómetros de la ciudad de Calatayud, Paracuellos se encarama en la ladera a los pies de un antiguo castillo musulmán.
datos prácticos
Ayuntamiento: Plaza de Santiago Gutiérrez, 1
Tel: 976 883 230
Email: jiloca@dpz.es
Gentilicio: paracuellano/a
Fiestas: Santa Eulalia (10 de diciembre). Santa Lucía (13 de diciembre)
Distancia a la capital
Altitud
paracuellos de jiloca
En la localidad se conservan varios edificios de notable interés, los más importantes son las dos iglesias, la parroquial dedicada a San Miguel y la de Santa María. La primera se ubica en el solar del antiguo castillo, dominando el caserío y con unas excelentes vistas del valle del Jiloca. Se trata de un edificio gótico al que se accede por una torre puerta barroca del siglo XVIII.
Hay que bajar callejeando hasta la plaza Mayor, donde se ubica la iglesia de Santa María, un edificio medieval completamente transformado a finales del siglo XVII, que aún conserva una portada gótica de ladrillo aplantillado. En su interior el visitante podrá disfrutar de uno de los retablos más singulares del renacimiento de la Comarca de Calatayud, el de Las Ánimas o de San Miguel, realizado por Morone, en el que reinterpretó alunas escenas del célebre Juicio Final de Miguel Ángel. No debemos abandonar Paracuellos sin mencionar que en la localidad existen dos ermitas, una dedicada a Santa Eulalia y la otra a San Roque.
iglesia de san miguel
El templo se sitúa en la parte alta del pueblo, sobre una cornisa de media altura de la cortada que flanquea el valle. Es un edificio de una nave de cuatro tramos, cubiertos con bóveda de crucería sencilla cuyos nervios parten de ménsulas conectadas por un entablamento corrido por toda la nave y la cabecera. Ésta es poligonal y está cubierta con bóveda de nervios. A los pies se prolonga un tramo, algo menor que los de la nave, dispuesto a modo de pórtico con una bóveda de crucería estrellada. En los siguientes tres tramos se abren pares de capillas de configuración barroca con bóvedas de medio cañón con lunetos, arista o cúpula con linterna, sobre pechinas.
El campanario se sitúa a los pies en el lado de la epístola. Precisamente la entrada al templo discurre bajo él mediante una doble bóveda de arista reforzada por arcos perpiaños muy potentes. El exterior muestra sus muros de ladrillo o de aparejo de ladrillo mampostería con sus contrafuertes sobresalientes de las capillas laterales. La torre presenta el vano de medio punto del pórtico de entrada, sobre él un cuerpo ciego con aparejo de ladrillo y mampostería y rematado por un cuerpo ochavado con los vanos de campanas de medio punto entre pilastras.
En este singular edificio se custodian una serie de interesantes retablos de los cuales destacan los realizados en la primera mitad del siglo XVI, el de San Blas y María Magdalena, el de Santiago y el de la Asunción de la Virgen. El más singular es el retablo Mayor, realizado por Pietro Morone hacia 1554, en el que este artista italiano, afincado en la localidad por aquellos años, reinterpretó modelos de pintores de su tierra como Daniele da Volterra, Perino de Vaga o Miguel Ángel, creando un conjunto absolutamente espectacular.