torrelapaja
Torrelapaja es el último pueblo en la frontera con Soria y, aunque desde la carretera apenas se aprecia el valor monumental de esta pequeña localidad, al adentrarnos en su calle principal encontramos pronto sus dos edificios emblemáticos frente por frente.
datos prácticos
Ayuntamiento: Calle Mayor, 9
Tel: 976 847 343
Email: torrelapaja@dpz.es
Gentilicio: torrelapajino/a
Fiestas: Virgen Malanca (primer domingo de septiembre). San Millán (12 de noviembre)
Distancia a la capital
Altitud
torrelapaja
Uno de los santos más populares de la comarca durante la Edad Media fue San Millán, cuyo culto se extendió por Aragón, toda Castilla y Cantabria. Este santo, según San Braulio Obispo de Zaragoza, nació en el siglo V en el caserío de Turrispalia, (Torrelapaja), dependiente de la villa de Vergegio, (Berdejo) hasta el año 1601.
En el año 1459, el Rey Juan II de Aragón construyó una torre de defensa en Torrelapaja para proteger sus tierras de los ataques castellanos. Dicha torre se corresponde con el campanario de la iglesia parroquial de Torrelapaja. Construida en piedra de sillería y rematada en cuatro cubos con sus aspilleras, está decorada con los escudos de Aragón y Navarra, que eran los de este rey.
Frente al templo se levanta un elemento arquitectónico único, superviviente en cuanto a estructura, de la herencia oriental en estas tierras: el patio de la casa-hospital de San Millán. Es el edificio más significativo del pueblo y sin duda alguna uno de los más singulares de la comarca.
iglesia de san millán
Con aspecto de fortaleza y recios muros de sillería, la torre de la iglesia muestra su cara defensiva, algo que resulta normal en una construcción de frontera. De hecho fue mandada hacer por el rey Juan II de Aragón en 1459 para proteger sus dominios de los ataques castellanos. Decorada con los escudos de Aragón y Navarra, casas que ostentaba dicho monarca, y rematada con cuatro cubos con sus aspilleras, su aspecto no deja lugar a dudas. La iglesia se amplió en 1569 y muestra actualmente una sobria estructura gótica. Dentro se conservan parte de las reliquias de San Millán y de otros doce santos, donadas por el rey cuando mandó levantar el templo. Dentro de la iglesia hay una sorpresa más: la capilla barroca de la Virgen de Malanca, con un magnífico conjunto de pinturas murales del siglo XVIII que están declaradas Bien de Interés Cultural desde 2001.
¿Dónde nació San Millán?
Este santo tan venerado en La Rioja nació, según algunas fuentes, en Torrelapaja, en el año 459, entonces barrio dependiente de Berdejo. Otros aseguran que fue en el mismo Berdejo y que posteriormente buscó retiro en Torrelapaja. En tierras de La Rioja se afirma que lo hizo en Berceo. Lo cierto es que el obispo zaragozano San Braulio fue el responsable de su hagiografía, creando involuntariamente la controversia dada la similitud de los nombres de Berdejo y Berceo en el latín primitivo en que redactó su crónica allá por el siglo VII.
Fue pastor de ovejas hasta sus 20 años cuando partió hacia La Rioja en busca de la espiritualidad. Murió a los 101 años tras una vida de milagros y predicación. Sus reliquias se reparten entre los monasterios de San Millán de la Cogolla y la iglesia de Torrelapaja.
Casa de San Millán
La Casa de San Millán es un hermoso edificio fechado en el siglo XVI y de transición del gótico al renacimiento. Al exterior luce sobrio, con una mínima decoración en su puerta y ventana y con la curiosidad de la garra de un oso clavada en su puerta como símbolo protector.
Es en el interior, hoy en malas condiciones, donde se abre un magnífico patio columnado con dos cuerpos, las del piso bajo de orden toscano y las del superior decoradas con yeserías. Los adornos en yeso alcanzan las cuatro esquinas, en las que se representan pasajes de la vida del santo, como la que está con su ganado, en la que hay una inscripción en caracteres góticos de difícil lectura. El uso del edificio fue el de hospital de peregrinos en el que se alojaban quienes visitaban las reliquias de San Millán. Declarado BIC en 2001, espera desde entonces su oportunidad para ser restaurado y puesto en uso.